lunes, 3 de septiembre de 2007

DVD: SERENITY * * 1/2

Para ser sincero, no tenía mucha fe en la ópera prima del realizador y guionista televisivo Josh Whedon, Serenity (E.U., 2005), y quizás tardé en animarme a ver este filme, perteneciente al muy oxidado género de la ciencia ficción espacial. Por fortuna, a la película no le encontré muchos peros como temía, a pesar de contar con una trama tan derivativa y deudora, nada menos, que de la trilogía de Star Wars (Lucas, 1977). Con el clásico argumento de la conflagraciones político-espaciales entre fuerzas imperialistas, dominando por completo un nuevo sistema solar sometiendo a todos sus planetas, habitados algunos por las fuerzas rebeldes, resistiéndose al dominio del Parlamento. Sobrevolando el espacio, se encuentra un pequeño escuadrón independentista dentro de la nave Serenity, capitaneada por Mal (Nathan Fillon, de Slithers), impulsivo y violento héroe a lo Han Solo, sediento de peleas y batallas.

Exhibida en el Festival de Sitges 2005, hay que reconocer que el filme no llega a ser el churro que uno podría imaginarse. Al menos, Serenity es infinitamente mejor que la última película de Viaje a las Estrellas: Nemesis (Baird, 2002), o Las Crónicas de Riddick (Twohy, 2004). Son varios sus puntos a favor: buenas escenas de acción y persecuciones de naves en el paraje desértico, un decoroso diseño de producción al estilo de los filmes espaciales de los 1970, logradas escenas de acción con... ¡espadas! y un poco de sentido del humor.

En algún tiempo del futuro indefinido, en “alguna lejana galaxia, hace mucho, mucho tiempo”. Una atractiva chica de rasgos orientales, River (Summer Glau), es rescatada por su hermano de los laboratorios de la imperialista Alianza, ya que cuenta con poderes psíquicos especiales. Detrás de su frágil apariencia, se esconde una chica de fuerza sobrehumana, por lo que es considerada como un arma letal. Sin embargo, un jefe parlamentario (Chiwetel Ejiofor), se encuentra tras la pista de River para aprovechar sus habilidades, y tratar de extraer de su subconsciente aquellos secretos que tienen que ver con la lucha que alguna vez emprendieron algunos humanos, ahora convertidos en caníbales. River y su hermano huirán en la nave Serenity (cuya tripulación por alguna extraña razón habla chino), surcando el espacio mientras escapan de las fuerzas parlamentarias.

Pero a esta típica cinta de ciencia ficción serie B le dolerán también muchas cosas, como una coherencia narrativa, notándose mucho los esfuerzos de Whedon para sostener con eficacia su guión durante las casi 2 horas que dura el filme. Quedan dudas al aire, por ejemplo ¿A qué se debe que predominen en la cinta escrituras orientales? ¿Porqué los personajes sueltan de pronto frases en chino? ¿Será que como dicen, el idioma del futuro ya no será el inglés, sino el chino?

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