viernes, 4 de septiembre de 2009

FROZEN RIVER * * * 1/2

Seco y frío (en varios sentidos) melodrama familiar, Frozen River (2008) exhibe los prejuicios sociales y raciales de un singular escenario.


Frozen River (2008) es una sencilla pero digna película independiente, que incluye un conjunto de buenos actores no profesionales. La única actriz profesional en su reparto es su protagonista, Melissa Leo, que ha ofrecido pequeñas pero buenas actuaciones en The Three Burials of Melquíades Estrada y en 21 Grams.

El escenario es, de hecho, bastante inusual, justo en la frontera de Nueva York con Canadá. En este melodrama social, debut en la dirección de Courtney Hunt, el escenario es uno enteramente cubierto de nieve, con un río congelado que está siendo utilizado como “puente” para traficar inmigrantes ilegales. En medio, se encuentra una comuna de indios Mohawk, una pequeña población blanca y una familia con problemas económicos. La historia cuenta las medidas desesperadas que toma una madre, Ray (sorprendente Melissa Leo), con deudas hasta el cuello, para evitar que, por ejemplo, ella y sus hijos pierdan una enorme televisión, un lujo, de lejos, absurdo en circunstancias tan críticas.

La trama es un sincero compendio sobre las contradictorias leyes que rigen este frío universo. No se nos invita a tratar de entender los códigos de conducta de los Mohawk, donde el delito de tráfico de inmigrantes no es castigado por la ley. Tal cosa lleva a una joven mujer Mohawk, Misty (Lila Littlewolf, estupenda), que vive en una vieja casa rodante, a vivir del tráfico de personas e invitar a la desesperada Ray a ganar dinero fácil con este negocio.

Por ello, Frozen River es una lograda metáfora sobre los prejuicios raciales, en donde todo indio Mohawk dentro de un auto es sospechoso de ser traficante y detenido por la policia, a menos, claro, que venga acompañado de un blanco. O detalles como el hecho de que un mismo inmigrante puede estar involucrado dentro de la misma red de tráfico de ilegales. Como sea, los temas están ahí, expuestos con un digno realismo por la realizadora, aunque exhibir la profundidad y complejidad de estos queda, al final, fuera del alcance de lo que pretende el filme. Ganadora en Sundance del Premio del Jurado a la Mejor Directora, y nominada al Oscar a Mejor Guión y Mejor Actriz, Frozen River es un duro y redentor melodrama familiar, protagonizado por personajes que, de todas formas, logran exhibir un sensible toque humano.


+Lo mejor: Su par de actrices protagónicas. Lila Littlewolf es toda una revelación.

+Lo peor: Cierto tono solemne (en especial, hacia el final), que le da a su trama una sequedad algo insoportable.

-Frozen River se exhibió en el Festival de San Sebastián, en donde Courtney Hunt estuvo nominada a la Concha de Oro. Además, la película ganó el premio SIGNIS, su protagonista, Melissa Leo, se llevó la Concha de Plata y la realizadora el premio TVE "Otra Mirada".

QUOTES

¡Oh, por Dios! ¡No es más que un puro tecnicismo!





Esta semana, la sección de "Quotes" tendrá un pequeño giro. En esta ocasión, presentaré algunos "quotes" del mundo del cine equivocados o erróneamente atribuídos.

"Play it again, Sam". Contrario a lo que muchos creen, Humphrey Bogart nunca dijo esta frase en "Casablanca". Lo que dijo fue "Play it once, Sam, for old times' sake." "Play it again, Sam" es el título de la obra teatral de Woody Allen.

"Beam me up, Scotty". Esta frase no apareció en ningún episodio de Star Trek.

"Elementary, my dear Watson". Como ya lo he mencionado en la sección de "Sabias que...", Sherlock Holmes nunca dijo esta frase en los libros originales de Sir. Arthur Conan Doyle.

"Me Tarzan, you Jane". Esta frase tampoco apareció en los libros originales de Tarzan o las películas. Los dos personajes simplemente se señalan diciendo "Tarzan, Jane".

"You dirty rat!" James Cagney nunca dijo esto en ninguna de sus películas.

"En el futuro todos seremos famosos por 15 minutos". Andy Warhol no dijo exactamente así, más bien lo que dijo fue: "En el futuro no habrá más estrellas. La televisión será tan accesible que todos serán una estrella por 15 minutos."

jueves, 3 de septiembre de 2009

EL CARTEL...CLÁSICO

La fuerza del cartel de Serpico (1973), no radica nada más en su psicodélica propuesta cromática, sino en la elección del retrato de Al Pacino, que refleja seguridad y vulnerabilidad al mismo tiempo.


Diener-Hauser
tenía una gran sensibilidad para el color y sabía utilizarlo de una forma muy creativa. Responsable de carteles como el de China Town, Hauser eligió para el cartel de Serpico, de Sidney Lumet, una técnica muy warholiana de colorear por capas un retrato. En este caso, el rostro de Al Pacino está cubierto con cuatro colores: verde, azul, amarillo y blanco, en varias tonalidades cada uno, lo que le da una cualidad psicodélica. Para 1973, año de producción del filme, parecía olvidado este estilo por los artistas gráficos.

La inspiración más directa son los retratos de The Beatles realizados por Richard Avedon en 1967, unas obras maestras del arte gráfico psicodélico. Si bien las pretenciones artísticas de Hauser no llegan a tal grado en este cartel, sí resulta una pieza atraciva en todo su conjunto, en especial, por ser una idea original e inusual para el cartel de un thriller policiaco.

De todas formas, es un cartel arriesgado. No intenta promocionar o vender un thriller policiaco. No hay ningún elemento visual que nos indique que se trate de una película de este tipo, a excepción del tagline “Many of his fellow officers considered him the most dangerous man alive – a honest cop”. Quizás la clave para entender bien la propuesta de Hauser, sea esta última frase, “a honest cop”, un "policia honesto".

El dilema al que se enfrenta Serpico en la película es: enfrentar a la corrupción policiaca. En ese sentido, el retrato de Pacino elegido para el cartel es magnífico. No nada más por la posición y ángulo del rostro, sino por la expresión de fuerza y extrema seguridad que presenta. No es tanto un policia lo que vemos, sino un ciudadano común, quien en un momento de la película deja su uniforme para entrar a juicio.

Los colores juegan un papel simbólico muy importante. El retrato luce más impactante con estos colores, y denotan aspectos psicológicos de suma intensidad, en especial, ese color amarillo dominante. El color amarillo nos habla de un personaje en estado de alerta, de emergencia, pero también de inestabilidad emocional. Intentan reflejar el momento en que la vida de Serpico da un vuelco. El sistema en el que creía se ha caído y sus ideales se ven amenazados.

Tenemos aquí el clásico marco blanco, visto en tantos carteles de cine de los 1970. Un margen creado por el mismo fondo de color sólido (negro en este caso), y que sirve siempre de soporte para la información escrita, diseñada con una tipografía clara y de marcadas líneas curvas.

miércoles, 2 de septiembre de 2009

Y...¿CÓMO LE PONEMOS?

¿De qué te ries?







Si bien no es una semana de escasos estrenos, la mayoría de las películas han quedado con buenos títulos. Comentaré tan sólo un par de títulos, dos casos clásicos de discusión en esta sección, es decir, una película sin título en español y una comedia con título discutible.

En primer lugar, tenemos Gamer, thriller ambientado en el futuro y protagonizado por Gerard Butler, que se ha quedado sin título en español. "El Jugador", que es la traducción del título original, hubiera quedado bien como título para una película de estas características. Como es una historia en el que hay juegos de vídeo, ciencia ficción y personas atrapadas en sus redes cibernéticas, y además, como en este universo electrónico (del cual me declaro ignorante) abundan los anglicismos, la distribuidora quizás pensó que sería un buen gancho comercial dejarlo en inglés. ¿Funcionará? Tal vez para los aficionados a los videojuegos nada más. Grecia y Francia decidieron seguir la misma estrategia, el primero con el mismo título, Gamer, y el segundo, con el título en inglés “Ultimate Game”. A ver cómo les va.

Luego tenemos Funny People, la nueva comedia de Judd Apatow, protagonizada por Adam Sandler, que ha quedado en español como “Hazme Reir”. Creo que cuando hay un verbo de por medio en un título, la forma en la que está conjugado influye mucho en el resultado final. En Run Lola Run, que en español se titula “Corre Lola Corre”, el verbo suena magnífico. Pero en el caso de “Hazme Reir”, suena soso, sin gracia. “Gente Graciosa” o “Gente Divertida", la traducción exacta, no hubiera sido una buena adaptación. Algo como “Los Graciosos", por ejemplo, hubiera funcionado. Como sea, aquí van ejemplos de títulos de otros países.

Приколисты - Rusia
Gente Gira - Portugal
Oi komikoi - Grecia
Wie das Leben so spielt - Alemania

Terminamos, como de costumbre, con los buenos títulos de esta semana. La nueva película de Isabel Coixet, Map of the Sounds of Tokyo, ha quedado bien como “Mapa de los Sonidos de Tokio”, en tanto con Frozen River se utilizaron tanto el título en inglés como la traducción al español “Río Helado”. Por último, la producción francesa “Cliente”, ha quedado bien como “La Clienta”.

martes, 1 de septiembre de 2009

SHREK THE THIRD * * *

Aunque entretenida y con personajes nuevos, Shrek The Third (2007) ya exhibe signos de desgaste en su fórmula de parodiar cuentos infantiles y... todo lo posiblemente parodiable.





Shrek the Third (2007), es la inevitable tercera película de las aventuras del ogro verde, que en 2001 causara sensación al debutar con su original propuesta de parodiar los cuentos clásicos infantiles. Dicen las malas lenguas, que Jeffrey Katzenberg, ex presidente de la casa Dreamworks, quiso producir esta clase de parodia como una especie de burla contra la Disney, por haberlo despedido luego de tantos años de trabajo en dicha empresa.

Quedó lejos el éxito de la primera película, que originaría una segunda parte (2004), que si bien no igualó a su predecesora en calidad, se lograba salvar en comicidad por las referencias paródicas a películas famosas. Además, engrosaba la fila de personajes con el Gato con Botas (voz de Antonio Banderas, tanto en versión en inglés como en español), ahora compañero inseparable de Shrek (voz de Mike Miers) y “Burro” (voz de Eddie Murphy).

Esta tercera película no es del todo mala. Hay mucha comicidad y bastantes gags logrados, unos verbales a cargo de Burro y el Gato con Botas. Sin embargo, la fórmula ya se siente desgastada y no tan atractiva como al principio. Hay algunos detalles novedosos, como los inverosímiles hijos burritos-dragones de Burro, o la inclusión de algunos personajes nuevos, como el joven rey Arturo (voz de Justin Timberlake), un hippioso Mago Merlín (voz del ex Monty Python Eric Idle) o Blanca Nieves, Cenicienta y la Bella Durmiente, convertidas en una versión medieval de Charlie’s Angels.

El rey del “Reino Muy, Muy Lejano” ha muerto. Además de ser presionado por Fiona (voz de Cameron Diaz) para que le de unos ogritos, Shrek no querrá ocupar el trono, e irá en búsqueda del primo de ésta, el Rey Arturo. En tanto, el príncipe Encantador (voz de Ruppert Everett), formará una rebelión junto a los más famosos villanos de los cuentos, para atacar el Reino y usurpar el trono.

La realización (ahora sin la habitual dirección de Andrew Adamson y colaboradores) está a cargo de Chris Miller y Raman Hui, sin nada del otro mundo más que el saber mantener un buen ritmo cómico, que en ningún momento decae. Esta tercera entrega de Shrek, no voy a negarlo, es entretenida y mejor que la segunda película, en especial, si se disfruta del humor escatológico. El problema es lo derivativa que se siente, al volver a los mismos escenarios, y sin muchos cambios de por medio, haciendo que todo el asunto no se sienta tanto como una tercera parte, sino como el “siguiente capítulo” de una serie televisiva.

++Todavía hay Shrek para rato, ya que la cuarta película estará lista en 2010.

lunes, 31 de agosto de 2009

RESERVOIR DOGS * * * * 1/2

En Reservoir Dogs (1992), Quentin Tarantino sentó las bases de un nuevo cine de gángsters, uno de historias entrecruzadas, final revelador y violencia sangrienta.


Muchos consideran que es la obra tarantinesca por excelencia, que luego de ver sus últimas películas jamás volverá a repetir un trabajo de este calibre. Aunque para mi gusto Pulp Fiction es la obra maestra de Quentin Tarantino, sin Reservoir Dogs (1992) aquella no hubiera existido. Fue la que sentó las bases narrativas y estilísticas que dieron forma a Pulp Fiction, que dieron origen a ese nuevo cine de gangsters de historias entrecruzadas, con personajes que tenían relación de una u otra forma.

En Reservoir Dogs los personajes ya dialogaban acalorada y largamente, sobre temas de la cultura pop que, a primera vista, parecían intrascendentes, como en esa vulgar pero absorbente conversación que tiene el grupo de ladrones primerizos sobre Madonna y su canción “Like a Virgin”, en un restaurante. Dicha conversación tomaba caminos insospechados, hasta acabar en una pequeña plática sobre los pros y contras de dar propinas.

La película fascinó en Cannes y en el Festival de Sitges, llevándose en este último los premios a Mejor Director y Mejor Guión. Tarantino presentaba un cine de gangsters que, en realidad se nutría de un bagaje inmenso del antiguo film noir, filmes policiacos y, lo más interesante, del cine de la “Nouvelle Vague” Francesa. Esto último en la manera de editar y contra la historia, en cómo acabamos involucrados con los personajes y sus diálogos.

La película abre con una sangrienta y frenética escena, en la que Mr. Orange (Tim Roth) está desangrándose dentro de un coche, a causa de una herida de bala. Mr. White (Harvey Keitel) es quien conduce, pero es imposible llevarlo a un hospital, ya que acaban de robar una joyería. Es poco lo que conocemos de los personajes al inicio, ni siquiera sabemos sus verdaderos nombres. Cada uno será identificado por un color que el jefe (Lawrence Tierney), quien organiza el robo, les asignará.

Será a lo largo de la narración en la que iremos conociendo más de cada uno de ellos, de la planeación del robo y cómo todo salió mal, debido a que entre ellos se encuentra un infiltrado de la policia. ¿Quién es? También Tarantino lo irá revelando conforme avance la historia.

Otra de las cosas que Tarantino dejó sentado en Reservoir Dogs, es que no sería un cineasta fácil de ver o digerir, debido en especial a la violencia extrema que exhibe en sus películas. Es memorable aquella escena en la que Mr. Blonde (Michael Madsen), el más antisocial y psicopático de todos los miembros del grupo, tortura, rocía de gasolina a un policia y le cercena una oreja, al ritmo de “Stuck in the Middle with You”, de Stealers Wheel.

Aunque si hay algo interesante en Reservoir Dogs, es que dentro de todo este sangriento y violento puzzle narrativo, en el fondo se encuentra un complejo entramado de relaciones y emociones paternofiliales entre los personajes. Esto no nada más en la obvia relación entre el jefe y su hijo, Eddie Cabot (el fallecido Chris Penn, hermano de Sean Penn), sino en la que se va formando entre Mr. White y Mr. Orange. Al ingresar a la banda y gracias a su carisma, Mr. Orange pronto se gana el afecto de Harvey Keitel. Y este cuadro es el que, precisamente, se acaba enfrentando en la escena final, cuando Mr. White proteja, casi hasta el último minuto, al moribundo Mr. Orange.

++Disponible en edición DVD común, Blu-Ray y una especial de dos discos. Esta última contiene Trailer, entrevistas con Quentin Tarantino, Tim Roth, Michael Madsen, Chris Penn y Eddie Bunker, "Reservoir Dolls", entrevistas con Quentin Tarantino, Monte Hellman, Jack Hill, Pam Grier y Roger Corman; tributos y dedicaciones, "Caso del ´92", "Playing It Fast and Loose" apreciación historica, "Guía de Estilo", "Reservoir Dogs 1x1", y mucho, mucho más. Existe una edición de región 1 con estuche metálico con forma de tanque de gasolina.

domingo, 30 de agosto de 2009

EL CARTEL

MAP OF THE SOUNDS OF TOKYO * * * *
De los mejor esta semana. El cartel de Map of the Sounds of Tokio está dentro de la más conocida tradición japonesa del diseño de carteles: la menor información escrita posible y un diseño que, a primera vista, transmite armonía y equilibrio. La idea es la abstracción del retrato de una geisha, centrándose usando un extreme close-up, en su ojo cerrado. El par de imágenes que se encuentran en la esquina superior derecha (unas ramas de bambú) y la esquina inferior izquierda (un cuerpo femenino recostado), no hacen más que sugerir la idea de ver en el pensamiento lo que se puede escuchar al cerrar los ojos. El maquillaje de la geisha se transforma aquí en un juego de formas cromáticas por demás intersante, y a esto se incluye, con similares fines estéticos, la textura de la piel del párpado y las formas orgánicas de las pestañas. El mérito estético del cartel, es que requiere observarlo por unos segundos para darnos cuenta que no estamos ante una pintura o una ilustración, sino ante la fotografía de un ojo cerrado. Y el maquillaje juega un papel importante al “disfrazar” el ojo. Lo menos destacable del cartel es su tipografía, que se nota muy común y corriente, quizás la menos apropiada para un cartel que, en cuanto a su imagen, resulta magnífico.


GLORY TO THE FILMMAKER * * * * *
Siguiendo con el tema “Japón”, otro cartel destacable es el de “Glory to the Filmmaker”, una excéntrica y muy kitsh propuesta, ad hoc a la personalidad cinematográfica de Takeshi "Beat" Kitano, su realizador. Este es uno de esos carteles que te lleva tiempo observar, y en el que te dejas sumergir en sus detalles. En su elaborado fotomontaje, tiene como centro un retrato del mismo Kitano, rodeado de imágenes de otros personajes y escenas de la película. El cartel transmite una sensación de caótico orden, en donde, dentro de una gran variedad de detalles e imágenes, todo se siente en su lugar justo en la composición. En su combinación de espectacularidad, surrealismo y, en especial, estética retro (recuerda mucho a carteles realizados en los 1960 y 1970), el cartel cumple, con todo y ser una pieza con valores artísticos, su cometido de ser sumamente atractivo comercialmente hablando. Es difícil que pase desapercibido, hasta para el observador más indiferente.




CASE 39 * * *
A primera vista, no parece muy original, pero lo que me gusta del cartel de Case 39 es su inquietante tratamiento visual. Me parece un gran acierto revelar nada más una parte del rostro de Renee Zellweger, entreabriendo una puerta hacia lo que parece un cuarto obscuro. En palabras, la imagen tiene el apoyo de un efectivo tagline “Some cases should never be opened”. Es un cartel que de inmediato te comunica la idea de una película de suspenso. Su punto de vista frontal, es otra de los aspectos notables, que nos enfrenta como observadores al personaje abriendo la puerta. Parece que estamos en esa misma habitación obscura, y que algo se nos revelará pronto. Gracias a ese efecto de luz barrida y borrosa en la parte de arriba, parece que somos nosotros los que hemos estado encerrados en esa habitación obscura y que la luz nos lastima los ojos. Da la impresión de ser una imagen simple, pero tiene un elaborado trabajo de retoque y montaje, incluso con una profundidad de campo, entre el rostro nítido y la mano borrosa. Un buen cartel.



SHORTS * * 1/2
Por último, el cartel de una película infantil. No sé si en realidad sea una película fallida, pero el cartel teaser de Shorts me gustó mucho más que el cartel del estreno. Es un fotomontaje atractivo y con colores que llaman la atención de los observadores infantiles (verdes, purpuras y el naranja del título), incluído ese “fantástico” destello detrás de los personajes. Su punto de vista inestable y el efecto de ver a los personajes como a través de un lente “ojo de pez”, es otro aspecto rescatable, que le imprime mucho movimiento y dinamismo a todo el conjunto. El arcoiris que rodea a los personajes, sirve por igual como base para la composición de las imágenes de los personajes. Su único pero, es que, como casi en todas los carteles de películas infantiles y familiares, la idea principal no es más que la de agrupar lo mejor posible a todos los personajes de la película.

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