viernes, 7 de marzo de 2008

SERAPHIM FALLS * * * 1/2

Para ser el primer largometraje “importante”, en la filmografía del realizador David Von Ancken, Seraphim Falls (E.U., 2006) es un western digno de revisarse. Más conocido por su faceta como realizador televisivo, dirigiendo episodios de series como CSI, The Shield, Numb3rs, Californicatión, Ancken tiene en su haber apenas y dos cortometrajes, Bucket List y Bullet in the Brain. Seraphim Falls trata una premisa argumental de lo más convencional y típica dentro del género, pero junta a dos actores de peso, Liam Neeson y el ex james bond Pierce Brosnan.

En los parajes montañosos y nevados de Nevada, el filme comienza con la persecución de un grupo de cazarecompensas, liderado por el sagaz y calculador Carver (Neeson), quien se encuentra tras el rastro de un herido aunque letal hombre, Gideon (Pierce Brosnan), quien huye, se oculta y es experto en el cuchillo cual Rambo del siglo XIX. La mayor parte del tiempo no es más que una exhaustiva persecución por el bosque, campo, ríos, cascadas, el desierto,... mientras la información sobre los antecedentes que la originaron se nos va dando de manera dosificada.

El giro final, cuando se nos revela qué hay detrás de está implacable persecución, una evidente venganza de uno contra el otro, se remonta a los tiempos bélicos de la Guerra de Secesión, y es uno de los momentos más inquietantes del filme. Quien parecía malo en realidad no lo es, y quien parecía ser el bueno,....lo es pero cometió un grave y costoso error, y ahora lleva un cargo de conciencia.

Son muchos los méritos de Von Ancken. El principal, es que a pesar de haber trabajado mayormente para televisión, luce un verdadero “ojo” cinematográfico, dentro de uno de los géneros más clásicos de Hollywood (de los favoritos de quien esto escribe), aunque más olvidados a la fecha. Su guión (coescrito junto a Abby Everett Jacques) no será extraordinario, pero en la forma su película es bastante lograda: bellos paisajes y fotografía de John Toll, una buena banda sonora, admirable producción que incluye un magnífico vestuario y ambientación, junto a las poderosas actuaciones de Neeson y Brosnan.

Por momentos, Von Ancken tiene problemas para encontrar el ritmo correcto del filme, con partes lentas y que no hacen más que alargar sin mucho sentido la película. Para muchos, harán falta más enfrentamientos, acción y tiroteos propios del género. Sin embargo, la apuesta de Van Ancken es otra, la de ofrecer una historia simple de redención y ajuste de cuentas moral, con un pasado tormentoso y el clásico mensaje de que la venganza no lleva a nada. El viaje de ambos personajes lleva tintes simbólicos, existenciales, conocerán lugares y personajes clave.
El enfrentamiento final tendrá una conclusión de lo más inverosímil pero necesario, en su mensaje metafórico de unión y fraternidad entre el Confederado Sur y el Norte Yanqui.

No hay comentarios:

Vistas de página en total