lunes, 19 de julio de 2010

SHREK FOREVER AFTER * * *

"Shreck Forever After", es una versión de "It's a Wonderful Life" adaptada a la historia del ahora inconforme ogro verde.

Si hubo algo que me gustó de Shreck Forever After (2010), la supuestamente última película de las aventuras del ogro verde, es que al menos ha estado mejor que su predecesora, Schreck The Third (2007). La tercera película me pareció que ya había perdido la brújula y agotado la formula de parodiar cuentos de hadas clásicos, idea en la que se había sostenido la franquicia. De hecho, para mí la primera película es la mejor, por haber sabido hacer, de una manera original y graciosa, una auténtica parodia no nada más de los cuentos de hadas, sino de las adaptaciones de la Disney de los mismos.

Shreck Forever After no tiene esta genialidad ni mucho menos, pero resulta mínimamente entretenida. No es más que una simple adaptación de la -esa sí- genial película navideña It’s a Wonderful Life (1946), de Frank Capra, al país “Muy, Muy Lejano”. Shreck se despide del cine sin muchas intenciones paródicas. Es decir, no creo que esta última película de Shreck sea una parodia de “It’s a Wonderful Life”. Lo que Mike Mitchell, su realizador, y colaboradores hacen, es una versión lo más cercana posible a cómo se vería la pesadilla de George Bailley, protagonista del filme de Capra, en la estresante vida familiar de Shreck. El resultado, tan solo a nivel de experimento animado, me ha parecido pasable y divertido.

En resumen, Shreck (voz de Mike Myers) está a punto de volverse loco en el epicentro de una rutinaria vida familiar junto a Fiona (voz de Cameron Diaz) y sus tres bebés. Por si fuera poco, Shreck está teniendo una especie de crisis de la mediana edad, ya que tiene miedo de no ser el mismo ogro aterrador de antaño. Vamos, Shreck tiene miedo de envejecer.

Luego de una crisis en el cumpleaños de su hija, Shreck decide hacer un mefistofélico pacto con un duende, Rumpelstiltskin (voz de Walt Dohrn), en donde esencialmente su vida no hubiera cambiado jamás de no haberse casado con Fiona y ser amigo de Burro (voz de Eddy Murphy). Como podremos imaginar, luego de saborear nuevamente la gloria de ser un ogro temido por todos, la nueva vida de Shreck se tornará una pesadilla al notar todo cambiado: Burro trabaja para el duende y su séquito de brujas, el Gato con Botas (voz de Antonio Banderas) es un gato mimado con sobrepeso; mientras que Fiona es la líder revolucionaria en el submundo de los ogros, quienes planean sublevarse en contra del duende y las brujas.

Si bien me agradó la película, no la he disfrutado del todo. Además de que extrañé las ingeniosas referencias cinematográficas de las anteriores películas, todo se siente ya visto antes. Aunque Shreck y Burro siguen teniendo buena química, y la parte más interesante es la presentación de ese mundo oculto y subterráneo de los ogros (en el que descubrimos que hay ogros más temibles y feos que Shreck), quienes conocemos la historia original ya sabemos hacia dónde se dirige todo, el mensaje final: Nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde. Shreck aprenderá a valorar su vida y amar lo que tiene.

El duende (perdón, pero nada más escribiré su nombre una vez) me ha convencido como villano. Nada temible, pero risible, como una caricatura de villanos de comics e historias de superhéroes: megalomaniaco, sexualmente ambiguo, explosivo, con una peluca para cada ocasión y estado de ánimo. A su servicio estará el flautista de Hamelin, con una flauta sofisticada que hace bailar a su voluntad todo ser a su paso. Hay un par de escenas simpáticas, que involucran números de baile bien coreografiados.

No creo que estémos ante la última película de Shreck. Si llega a haber una quinta película, sus realizadores tienen que pensar en algo mucho más original que esto.

++Lo mejor: Lo entretenida y nada pretenciosa que resulta.
++Lo peor: Que ya nos sabemos el final casi de memoria.

No hay comentarios:

Vistas de página en total