lunes, 2 de mayo de 2011

SLUMDOG MILLIONAIRE * * * *

Dev Patel y Freida Pinto en la oscarizada "Slumdog Millionaire".


Slumdog Millionaire (2008) fue la ganadora al Oscar a “Mejor Película” en 2009. Estaba casi cantado que atraparía a los miembros de la academia. Una “feel good movie” sobre las aventuras de un par de hermanos para sobrevivir la miseria en Bombay. El premio fue bien merecido, ya que Slumdog Millionaire es una buena película, donde Danny Boyle, quien ganó el Oscar a “Mejor Director”, consigue conmover, impresionar y mantenernos en un suspenso constante, sin caer en ningún momento en chantajes sentimentales.

La película es una adaptación de la novela de Vikas Swarup, y aires dickensianos se sienten y respiran a lo largo de la película. Es como llevar a Dickens a la India (Oliver Twist en los barrios pobres de Bombay), pero puede adivinarse -o al menos suponerse- qué atrajo a Boyle de la historia. Ya antes en “Millions” (2004), ofreció una historia con dos hermanos de personalidades diametralmente distintas: uno de ellos noble de corazón, mientras el otro más ambicioso.

Slumdog Millionaire tiene como eje narrativo un concurso de television, “Who wants to be a millionaire?”. En el programa se encuentra concursando nuestro protagonista y héroe, Jamal (el británico de origen hindú Dev Patel), un humilde chico, tratando de contestar difíciles preguntas sobre cultura general frente a miles de televidentes. El escenario es de lo más sencillo: Jamal se encuentra sentado al centro, frente a un insufrible y manipulador anfitrión (Anil Kapoor), cuyo trabajo no nada más es decir las preguntas sino hacer dudar al concursante, provocarlo y ponerlo nervioso.

Alrededor del concurso tendremos dos narraciones: en una vemos los orígenes de Jamal, desde su niñez, junto a su hermano Salim, ambos interpretados por pequeños actores no profesionales. Jamal va recordando episodios clave en su vida, cada vez que da una respuesta correcta en el programa, para explicarnos cómo es capaz de responder, siendo evidente que no ha recibido educación alguna. Al menos educación académica, ya que lo que Jamal sabe se debe a las experiencias que le ha dado la vida, y una buena memoria para recordar. Por ejemplo, ¿Cómo sabe el nombre de un actor de la India famoso? Simplemente, porque es un gran fan de él, y se las ha arreglado para verlo en cine. Lo que hará para conseguir su autógrafo será totalmente asqueroso.

En otra narración vemos el arresto de Jamal en una estación de policia, donde un inspector (Irrfan Khan) se encuentra interrogándolo, al sospechar que ha hecho trampa en el concurso. El inspector cree que Jamal ha recibido las respuestas previamente.

En tres líneas narrativas somos testigos de problemáticas sociales muy comunes en la India, como la explotación infantil. Niños huérfanos y sin hogar son puestos a trabajar por adultos, como cantar y recitar poemas en la calle. Antes les hacen pruebas de voz, y si hay uno desafinado lo torturan, como en una escena de gran crudeza, donde un niño es convertido en ciego al vertirle un líquido caliente en los ojos. Aquí, un pequeño Jamal conoce al amor de su vida, Latika (hermosa Freida Pinto), y luego de que el destino los separe siendo niños, aquel se dedicará a buscarla. Salim tomará también su propio camino, y no será el más recto de todos, cuando acabe involucrado con estas mafias.

Al final, Slumdog Millionaire es un cuento de hadas, es cierto. Sin embargo, es un cuento de hadas narrado con gran brio, fuerza y una obsesión por el realismo hipnotizante. La música es uno de los aspectos más logrados, incluyendo la dirección fotográfica (premiados también con un Oscar). Y hablando de la música, Danny Boyle cierra la película con un homenaje al cine musical de Bollywood, además de una secuencia de créditos increíble, que deja patente la versatilidad de este realizador.

++El DVD incluye el "Cómo se hizo", escenas eliminadas, videoclip "Jai Ho", featurette "Del guión a la pantalla",  y featurette "Bombay Liquid Dance".

3 comentarios:

Joel Meza dijo...

Sólo en algo concuerdo, Alex: Frieda Pinto es hermosa. El cuento de hadas que se vale de tragedias infantiles, sociales y religiosas verdaderas a mí me dio asco. Y por las críticas y comentarios que leí en su momento, parece que estoy en la minoría esta vez.
Salud.

Alex dijo...

No coincido Joel. Toda la fuerza de la película radica precisamente en ese retrato de la miseria en la India. Sin este, no tiene sentido ver al personaje luchar y pasar por todos los obstáculos para tratar de ganar el concurso. El hecho de que sea una historia con final feliz, no quiere decir que deba pasar por alto aspectos crudos o poco agradables del país. Que blanda hubiera sido la historia ver a un chico rico tratando de ganar un concurso para volverse... rico. Bueno, en gustos...
Saludos!

Joel Meza dijo...

Pues es que la historia central, precisamente me parece blanda, Alex y el uso de esos elementos de la explotación de los huérfanos para darle fuerza me terminó molestando. Hombre, tan fuera de lugar me pareció el asunto, como los hechos verdaderos de los que nos enteramos después y que ocurrieron con los pequeños actores y sus familias después del estreno de la película.

Vistas de página en total